“El Llanito”, la comunidad que es hogar de la Luciérnaga en Michoacán.
Pronto la oscuridad dio paso a pequeñas luces tintineantes, que al adentrarnos más en el sendero se fueron multiplicando, el silencio como regla principal provocaba que lo único que se escuchará fueran nuestros pasos y esporádicos susurros entre nosotros, dando una atmosfera muy íntima y especial al recorrido.