¿¡Qué tal Juglares!? El día de hoy les traemos un artículo muy interesante sobre la historia de la ciudad de Morelia, antes llamada Valladolid. Se dice que “Morelia, es la cuna ideológica de la independencia”, te has preguntado ¿Por qué? Bueno, sigue leyendo y lo descubrirás.
A principios del siglo XIX, en Valladolid existía una población de 20 mil personas, siendo una minoría, la de los españoles venidos de la península, después los criollos, y finalmente una gran cantidad de indígenas, mestizos y demás castas que conformaban la sociedad novohispana.
En Valladolid se habían establecido familias muy ricas, que tenían gran parte de las haciendas cercanas a la ciudad, controlaban además la distribución y mercado de los productos agrícolas que alimentaban a gran parte de la Nueva España.
Valladolid, a través del tiempo, se distinguió por ser una ciudad que daba mucha importancia a la actividad cultural, es así que además de contar con el Colegio de San Nicolás y el Seminario Tridentino, también tenían las casas de estudio de los franciscanos, agustinos y mercedarios, lo que generó una sociedad letrada, que escribía en los principales periódicos del territorio. Por otra parte, la alta sociedad se reunía a discutir textos literarios, escuchar piezas musicales y a discutir sobre temas políticos, en las llamadas, “tertulias literarias”.
La educación que recibían los criollos, les permitió entender el contexto político del mundo, se enteraban de las luchas entre las naciones europeas que se estaban pagando con recursos de las colonias, sin recibir a cambio algún beneficio, al contrario, cada día eran más notables las diferencias entre los españoles y todos los nacidos en América.
En este tenor, poco a poco, varios grupos de criollos, comenzaron a reunirse para discutir cómo podrían acceder al control político de un territorio del que se sentían dueños por haber nacido ahí, la solución: Independencia.
Independencia al estilo de las Juntas gobernativas de Sevilla, quienes en ausencia del Rey, gobernaban en nombre de él; esa era la intención de estos criollos ilustrados, formar una junta que gobernara en nombre de Fernando VII, pero con total independencia de los españoles.
El plan era ideado por tres notables personalidades de Valladolid, el capitán del regimiento de Valladolid, José María García Obeso, Mariano Michelena, alférez del regimiento de la Corona y su hermano mayor, el licenciado Nicolás Michelena, todos educados en el Seminario Tridentino, además de otros notables como el cura Vicente Santa María, José Antonio de Soto y José María Barca y León, las reuniones tenían su sede en la casa del capitán García Obeso (actualmente es propiedad de un Banco).
El plan consistía en armar una junta constitutiva que jurara lealtad a Fernando VII, rey de España; y mientras este estuviera cautivo por los franceses la Junta gobernaría la región. En todos los virreinatos existía el temor de que los españoles los entregaran a los franceses, por lo que se formaron Juntas en cada uno de ellos.
Cuando la conspiración fue descubierta, apresaron a los hermanos Michelena y a todos los involucrados. La declaración de Luis Gonzaga, uno de los delatores dice que cuando Michelena le explicó el plan, este trataba de “repetir juramento a Fernando VII, por la pérdida probable de España y las traiciones que se estaban experimentando allá”.
El proyecto de los conspiradores, explicado por ellos mismos, era “después de hacerse dueños de la situación de la provincia, formar en la capital un congreso, que gobernara en nombre del rey, en caso de que España cayera en la lucha contra Napoleón”.
Aunque su objetivo, no era la independencia total de España, cabe resaltar que estos hombres tuvieron el valor, para hablar de libertad, de autonomía, y sobre todo, que buscaran solucionar la situación que estaban viviendo.
Morelia, es “Cuna ideológica de la independencia”, ya que las primeras ideas que influyeron en el pensamiento criollo, toman fuerza y salen del corazón de esta ciudad.
